El tiempo en Valladolid da una tregua y nos deja disfrutar de nuestra querida playa.
Cuando uno piensa en una playa se imagina kilómetros de arena blanca, el mar infinito, un montón de sombrillas y bonitos atardeceres, ¿verdad? Pues os vamos a decir una cosa, a pesar de estar a cientos de kilómetros de nuestra segunda playa -Santander-, Valladolid tiene playa y con todas las letras.
La Real Academia de la Lengua Española define playa como: ribera del mar o de un río grande formada de arenales en superficie casi plana. Una vez dicho esto, que nadie te diga que en Valladolid no tenemos playa.
Cuántas y cuántas veces habremos dicho a nuestros amigos de fuera «en Valladolid tenemos playa» y nos han mirado con cara de sorpresa. Pues sí, Valladolid tiene playa; vaya que si tiene, por tener tiene hasta chiringuito.
La playa de las Moreras se instaló en 1951 de manera muy modesta y, con el paso de los años, ha ido creciendo hasta lo que conocemos hoy en día. Durante los años 50-60 fue el epicentro para los vallisoletanos calurosos que, lejos del mar, decidían plantar su sombrilla en las arenas de la ribera.
Bien es cierto que esta afluencia ha descencido, pero son muchos los que aún se acercan a las Moreras a tomar el sol o a estar con sus amigos en las toallas y, los valientes, a darse un chapuzón.
Pero las Moreras no son solo arena y río, además de esto, cuenta con una oferta deportiva muy variada, que va desde las máquinas de gimnasio instaladas en el paseo, hasta pistas de baloncesto, fútbol y voley playa. Incluso hay una escuela que imparte cursos de piragüismo y paddle surf.
Con la ola de calor que se avecina no digas que no te hemos avisado.
Y tú, ¿eres fiel a la Playa de las Moreras?