Una auténtica joya en plena Acera Recoletos.
La Casa del Príncipe de Valladolid es uno de los mejores edificios modernistas de España. Así lo han elegido los lectores de la revista Architectural Digest (AD), una de las publicaciones de referencia en el mundo de la arquitectura.
Así definían este precioso edificio en la revista Architectural Digest (AD):
Puede que no sea modernista puro, pero posee elementos característicos del movimiento y además su autor, el arquitecto Jerónimo Arroyo, se formó en la Escuela de Barcelona de finales del siglo XIX así que sí, respira ese aire que empezaba a ser propio del Modernismo. Se llevó a cabo entre 1906 y 1908, está construido en torno a un patio interior y lo más llamativo es sin duda su fachada, sobre todo la esquina donde está el portal del inmueble, acabado en un torreón cilíndrico culminado en una cúpula, con cinco miradores bellamente decorados, columnas y elementos vegetales, siempre con esas peculiares balconadas y las líneas curvas. Un poco más austero que otras construcciones, la Casa del Príncipe está considerada como el claro ejemplo de la arquitectura burguesa de la época y sirvió para proyectar esos inicios del modernismo castellano leonés.
En la encuesta que se llevó a cabo, participaban un total de ocho edificios modernistas de todo el país. En dicha votación, la Casa del Príncipe obtuvo un 7,63% de los votos, por detrás de El Mercado Central de Valencia (11,09%), El Palacio Longoria de Madrid (11,74%) y La Casa Lis de Salamanca (18,5%).
La Casa del Príncipe de Valladolid se encuentra en la Acera Recoletos y forma, junto a otros edificios emblemáticos, una zona que en el siglo XIX se forjó como el lugar por excelencia de la burguesía de la ciudad. No hay más que pasear por el entorno y echando la vista al Campo Grande uno siente que se traslada a otra época.